¿Alguna vez te has preguntado por qué surgieron las oficinas móviles? En realidad la respuesta es muy sencilla. Como todas las cosas, también los negocios evolucionan. Éstos datan de varios siglos atrás y han venido dejando huella para quedarse. Porque ¿qué sería de nosotros los humanos sin un sistema de transacción?Recordemos que en un principio existió el trueque como forma de obtener recursos. Era tan sencillo como ofrecer algo a cambio de un bien que se necesitara (o de un servicio que se requiriera). En algún momento las civilizaciones antiguas notaron que el valor de los bienes era dispar, o sea, que no era balanceado al momento de hacer sus trueques, así que la moneda entró en funcionamiento.

La moneda, actual modo de realizar negocios, fue todo un éxito, y prueba de ello es que los truques ya no están siendo utilizados de ninguna forma. Así fue más sencillo establecer valores más justos para las mercancías. Lo interesantísimo de esto es que también fue como se profundizó en el juego de oferta y demanda en los mercados. La moneda permitía un juego más razonable y honesto (a pesar de que a la fecha se haya distorsionado).

Por supuesto, los bienes no fueron los únicos que tenían precio. Los servicios también eran altamente requeridos. Sin embargo, no fue hasta el siglo XX (recientemente) que los bienes y servicios se vieron íntimamente ligados entre sí. Entre los mercadólogos y grandes empresarios se dieron cuenta de que la oferta de sus productos debía estar atada totalmente a un servicio, no sólo a un bien material. Es decir que cualquier cosa ofrecida debía proporcionar soluciones extras como servicio. Por ejemplo, la comida rápida de McDonald’s dejó de ser sólo comida rápida y se convirtió en una solución para aquellos que necesitaban de un servicio en extremo instantáneo, debido a la falta de tiempo para comer en casa. O bien, un conjunto de ropa no sólo se mantuvo como un conjunto de ropa sino que apelaba a la necesidad de proyectar una imagen, convirtiéndose en un servicio integral de cambio de imagen que incluía desde la ropa hasta la modificación de detalles con sastre.

Hoy en día, gracias a miles de intentos fallidos en el pasado, tenemos la satisfacción de contar con un sinnúmero de avances tecnológicos que nos permiten mayores facilidades en cada aspecto de nuestras vidas. ¿Quién de nosotros se imagina un mundo sin internet? ¡Ya nadie! Los más jóvenes adultos de hoy ya nacieron rodeados de computadoras y teléfonos celulares. Las generaciones siguientes no sabrán lo que es no poder mandar un mensaje de texto al instante.

Aunque las circunstancias dicten que es demasiado para poder nosotros hacer un propio balance, la verdad es que la tecnología ha venido cambiando sólo para mejorar nuestras vidas. Es cuestión de cada persona encontrar la manera de no obsesionarse con estas innovaciones. No todo está perdido, y en los negocios, la tecnología no puede dejarse de lado. Lo veremos un poco más adelante.

La globalización también es un tema importante que ha revolucionado la forma en que se desarrollan los negocios. Tan sólo tres décadas atrás era prácticamente un suplicio tener que hacer negocios hasta el otro lado del mundo. Hoy en día es tan sencillo como levantar una orden por internet y hacer el pago a través del portal. Este tipo de mejoras son sin lugar a dudas gracias a la tecnología que ha permitido la globalización, o sea, un fenómeno en el que todos estamos conectados y comunicados. En años pasados era imposible pensar en algo así, sino, preguntemos a los abuelos.

Estos dos elementos permiten que los negocios de hoy sean mucho más sencillos que anteriormente. Por eso, si una empresa quiere mantenerse como líder en la innovación, debe estar siempre buscando la forma de facilitar sus transacciones con sus clientes y proveedores. Para ello, las oficinas móviles han sido una solución más. Las oficinas móviles tienen la característica de ahorro en muchos aspectos, que además se adaptan a los tiempos actuales y fungen como una herramienta nueva de trabajo. ¿A qué nos referimos? Simplemente a que ya no es necesario pasar todo el día en una oficina de un edificio, que queda a kilómetros de distancia del hogar, donde el ruido del exterior, las distracciones de todos lados, el mismo ambiente dentro de la oficina estable llegan a perjudicar el trabajo.

En una oficina móvil se puede realizar el trabajo de manera más efectiva, puesto que se puede colocar cerca de lugares específicos (como el hogar) o céntricos para disminuir el traslado de casa a edificio. Además, aísla los distractores del exterior y permite que las actividades se centren en uno mismo. Por si eso fuera poco, las oficinas móviles abren posibilidades para trabajar dentro de construcciones o áreas que no tienen una oficina estable como tal.

Ésta es la nueva manera en que se llevan a cabo los negocios. Porque no se necesita más que una computadora portátil, internet y una oficina móvil para realizar miles de procedimientos de negocios. A esto hemos llegado y nos sentimos confortables con los avances. Si quieres mantenerte en la línea innovadora de las empresas, te invitamos a que pruebes nuestros servicios de oficinas. Encontrarás que, en efecto, las maravillas que la tecnología y la globalización han creado, son ideales para tu tipo de negocio.

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